Poemas sobre el silencio

¡QUÉ SÍ!

Que si pienso en callarme

y ya no sé cómo explicar

el dolor que presiona mi pecho,

es por ti, nada más.

Que si mil y una locuras

volaron por mi mente,

poco tiempo atrás,

es por tu ausencia, sin más.

Que si las lágrimas borran mis mejillas

acongojan mi garganta

y me hacen suspirar,

es por tus palabras, tu vanidad.

Que si justifique lo injustificable,

que si grité en silencio,

que si la verdad es inapelable,

que si me empiezo a acostumbrar

a imaginarte en la lejanía,

siendo un simple recuerdo a olvidar;

es por tu falsedad encubierta

por tu recién nacida maldad.

Que si te digo adiós

y a los minutos hola,

es porque no puedo creer

lo que me haces ver,

es porque antaño

fuimos la misma piel,

es porque te conocía

y tu imagen me precedía,

es porque jamás creí

que este día llegaría…

Qué sí, pensé en callarme

al no saber cómo explicar

el dolor que presiona mi pecho,

por ti, sólo por ti, sin más.

Qué sí, mil y una locuras

volaron por mi mente,

(las logré alejar),

fue por tu huida, sólo por ti, sin más.

Qué sí, las lágrimas borraron mis mejillas

acongojaron mi alma herida

y me hicieron suspirar,

fue por tus palabras, tu falta de verdad,

por ti, sólo por ti; tú y nada más.

CONFESIONES MUDAS

Y si el silencio alzase

su voz silenciosa al viento,

rompiendo el espacio, el tiempo,

qué habría de decir.

Y si al silencio le otorgase

una voz sigilosa al lamento,

arrebatada de los pensamientos,

cuánto habría de contar.

En ocasiones, mejor callar.

Y si el silencio,

cansado de escuchar,

gritase a pleno pulmón,

gritase hasta amorrar.

Hastiado de dolor.

Ahíto confesor.

Sueños que en la mar

vagan hacia el horizonte.

A veces, mejor declamar.

EL SILENCIO DEL DOLOR

Nació sin saber por qué nacía,

Lloró hasta quedarse sin voz,

Sonreía sólo por estar viva,

Era la niña de su corazón.

El tiempo se hizo su aliado,

Durante el camino mucho tropezó,

Su padre siempre estuvo a su lado,

Su madre la perdonaba sin rencor.

Cuando creía que caminaba a solas

Cuan equivocada estaba,

Pues en cada paso, cada zancada,

Sus padres por ella velaban.

En silencio maldijo sus errores,

A gritos pidió perdón,

Una disculpa que era innecesaria,

Pues ellos comprendieron el error.

En silencio impreca hoy a muchas

Que reniegan de lo que fue su familia,

En silencio, siempre en silencio,

Perdona, pero jamás olvida.

En silencio aguanta la presión del pecho,

El dolor de ver a un padre llorar,

En silencio no concibe perdón de ello,

Todo ello es incapaz de perdonar.

En silencio repasa su vida

Intenta comprender el porqué,

En silencio se llena de ira,

En silencio comienza a arder.

El dolor de un alma malherida,

La desesperación de no poder ayudar,

En silencio las palabras brotan entre líneas,

En silencio más no quiere silenciar.

En silencio aprende de sus errores,

Entre susurros maldice a las ladronas,

Unas manilargas que sisaron su alegría;

Se acerca el día de pagar su algarabía.

Cuando sentía  que terminaba el martirio

Cuan equivocada estaba,

Pues en cada paso, cada parada,

Sus enemigos le negarían auxilio.

El tiempo se hizo su aliado,

Durante el camino mucho aprendió,

Sus amigos permanecieron a su lado,

Su familia engendró el rencor.

Nació sin saber por qué nacía,

Lloró hasta quedarse sin voz,
Sonreía sólo por estar viva,
Era feliz en su interior.

SOÑANDO CON ROMPER EL SILENCIO

Sueña que te sueña

Que sueño que soñé,

Que soñando entre sueños

Un día desperté.

Soñaba que no soñaba,

Que las pesadillas de la noche

Al fin cesaban,

Y entre sueños y mal sueños

Los sueños se escapaban.

Sueña que te sueña

Que sueño que soñé,

Que soñando entre sueños

Un día te encontré.

Soñaba que no soñaba,

Que la realidad

Mi vida gobernaba,

Y entre sueños y mal sueños

Los sueños me atrapaban.

Sueña que te sueña

Que sueño que soñé,

Que soñando entre sueños

Comencé a comprender.

Soñaba que no soñaba,

Que el dolor de mi alma

Comenzaba a pesar,

Y entre sueños y mal sueños

Los sueños me dañaban.

Sueña que te sueña

Que sueño que soñé,

Que soñando entre sueños

El silencio me va a envolver.

Soñaba que no soñaba,

Que el silencio

Mis suplicas silenciaba,

Y entre sueños y mal sueños

De mis sueños despertaba.

Sueña que te sueña

Que sueño que soñé,

Que soñando entre sueños,

Silencio no guardaré.

Soñaba que no soñaba,

Que los problemas

A mí me buscaban,

Y entre sueños y mal sueños

El silencio yo acallaba.

SILENCIO ETERNO

Como Romeo y Julieta

Nuestro amor fue trágico,

Como Romeo y Julieta

El hado halló el atajo.

Ahogando los “te quiero”,

Mirándonos en silencio,

Un adiós, un beso,

Era el más dulce de los secretos.

Como Romeo y Julieta

Nadie comprendía lo que pasaba,

Que si yo te amaba,

Que si tú me querías,

Que si eran chiquilladas,

Que si eran tonterías…

Como Romeo y Julieta

El final llegó apresurado,

Como Romeo y Julieta

Elegí morir a tu lado.

Viviendo sin tus silencios,

Apartando las caricias,

Mi vida no sería vida,

No vivo sin tu sonrisa.

El silencio fue nuestro aliado,

El secreto nuestra condena,

Y esta negra parca que nos abraza,

La muerte más certera.

SILENCIO, DUERME

Siempre complacida,

(nunca complaciente);

Imaginaba que en la vida,

(aquel vaivén de gente),

Llena de jolgorio y alegría;

Estaría a sus pies,

Nunca sería vencida.

Como un fucilazo inesperado,

Inesperado cual centella,

Olvidase el mundo de ella

Sumiéndola en el silencio.

Incubada sin amor,

Llorando abandonada,

Esperaba y esperaba,

Nadie la consolaba.

Calló el llanto amargo,

Incesante y perturbador,

Oyese en las noticias, el bebé murió.